Por Camila Galfione
Cuando una mujer anuncia su boda, uno de los temas que más inquieta a su núcleo íntimo es qué se va a poner. Aquí comienzan los consejos de todo tipo y color. Por más bien intencionadas que sean las valiosas opiniones de nuestros seres queridos, muchas veces éstas tienden a ser sugerencias que poco tienen que ver con la persona que se casa. Hay novias que tienen claro cómo quieren lucir el día de su boda, pero las que no, terminan siendo influenciadas y sintiéndose ajenas a su estilo.
La comodidad es fundamental para lucir mejor que nunca. Por fortuna, existen todo tipo de vestidos y joyas para que cada mujer encuentre lo que más se adecue con su personalidad. Con el fin de ayudar a las futuras novias, en Sarah Kosta armamos una guía especial para que cada una, siguiendo su propio estilo, sepa qué alhajas lucir el gran día.
Las mujeres clásicas subliman la calidad. Si sos una de ellas, probablemente prefieras joyas con diseños tradicionales, de materiales como el oro y con piedras preciosas. ¿Pensaste dar el “sí, acepto” con un diamante?

Anillos de la colección Wedding de Sarah Kosta.
Apostar por lo recargado es la característica más distintiva de las enigmáticas. Si sos una de estas misteriosas y cautivantes mujeres, un tocado es el detalle que no puede faltar. Dado que es un estilo que apuesta por la mezcla de materiales en un principio disímiles, como perlas con cadenas, una buena opción es mandarte a hacer un tocado totalmente inusual y ecléctico.

Foto: Kako Abraham | Campaña Wedding de Sarah Kosta.
Si sos una romántica no te puede faltar el cuarzo rosado: la piedra del amor. Es probable que te inclines hacia joyas bien femeninas y en tonos pastel. ¿Consideraste la idea de usar una alhaja de tu abuela para aportar un toque vintage?

Diseños con cuarzo rosa de Sarah Kosta.
Lo brillante y llamativo atrae por sobre todo a las más sexies. Si te identificás con este estilo, las joyas de gran tamaño con brillantes o gemas únicas posiblemente sean tu fascinación, y un detalle así no puede faltar el día de tu boda. ¡Cuidado con los excesos!

Foto: Kako Abraham | Campaña Vivaldi de Sarah Kosta.
Si tu estilo es natural seguramente te sientas identificada con piezas discretas y neutras, ya sea en plata como en oro. Si optás por llevar algún modelo con piedras, es posible que te sientas más a gusto con un diseño de líneas simples.

Foto: Kako Abraham | Campaña Wedding de Sarah Kosta.
Si, como Letizia Ortiz, tu estilo es el de una lady, por tu elegancia y meticulosidad empatizarás con alhajas pequeñas, clásicas y discretas, con frecuencia en oro o con perlas.

De la colección Wedding de Sarah Kosta.
A todo se animan las eclécticas. A la hora de elegir las joyas para su boda lo más seguro es que opten por aportarle un toque de color y diversión a su outfit con una pieza llamativa. Es importante recordarle a estas creativas que siempre, pero en especial para su casamiento, menos es más.

Brazalete calado con cristales (Foto: Kako Abraham) y caravanas con piedra de la luna y cristales. Todo de Sarah Kosta.
Las mujeres de estilo dramático, como la editora de Vogue Japan Anna Dello Russo, tienden a las joyas exuberantes y recargadas, y a las superposiciones. En Sarah Kosta nos encanta combinar distintos diseños, pero la clave para hacerlo, como destaca la icónica Iris Apfel, es que las piezas den la sensación de haber nacido juntas.

Foto: Tali Kimelman | Anillos de la colección Toscana de Sarah Kosta.
Si sos una minimalista, no te quedes únicamente con las alianzas. Nosotros te sugerimos que te animes a algo más, sin perder esa esencia que te caracteriza. ¿Pensaste en ponerte algunos pendientes de líneas depuradas?

Caravanas con cristales y anillo solitario con cristal (Foto: Tali Kimelman). Todo de Sarah Kosta.
Por último, las más chic prefieren poco, de buena calidad y con un toque distintivo y elegante que las identifique. Si este es tu estilo, una buena idea para diferenciarte es llevar el famoso something blue a la vista, ¿por qué no un anillo de zafiros?

Anillos con zafiros de Sarah Kosta.
Lo más importante el día de nuestra boda es ser y sentirnos nosotras mismas. Para ello, nuestra imagen cumple un rol fundamental. A la hora de tomar decisiones, respetá tu estilo, seguí tu instinto y escuchá tu corazón.